FALTOS DE FUELLE.
La coincidencia horaria provocó que se aplazaran otros partidos de la jornada
Decepción. Tras un par de semanas imbatido, el Sanpa volvió a pinchar el pasado sábado en casa, desaprovechando así una buena oportunidad de sumar una nueva victoria y seguir ascendiendo puestos en la Tabla. El Olesa, que llegaba a Sant Joan Despí con un punto más que el conjunto verdiamarillo, supo leer mejor el partido y sacar tajada de sus numerosas oportunidades, obteniendo a base de paciencia una cómoda ventaja de dos goles, que solo se vería reducida en el tiempo de descuento, en una tardía e insuficiente reacción sanpera.
En el año del 50 aniversario prosigue la magnífica promoción de la cultura asiática en el Sanpa.
A pesar de disponer solamente de 13 efectivos tras la plaga de lesiones de las últimas semanas, la UD San Pancracio afrontaba este encuentro con cierto optimismo, en parte gracias a los buenos partidos jugados en las semanas anteriores. Sin embargo, la historia vivida ante el San Roque se volvería a repetir, y la falta de gol volvería a lastrar las opciones de las huestes sanperas. La producción ofensiva no sería muy prolífica ante un rival muy bien plantado atrás, al que no le importó jugar en campo propio a la espera de la aparición de espacios en la retaguardia local. Esto provocaría que, a la mínima bajada de concentración o intensidad, el Olesa pudiera provocar algunas situaciones de cierto peligro, que al principio resultarían algo inócuas, y después más inquietantes, por lo que exigiría a Pani demostrar sus formidables aptitudes. Hasta que llegó el momento que esto no sería suficiente. El 0-1, pasada la media hora de partido, llegaría tras una doble ocasión visitante. El primer disparo, en primera instancia, sería detenido por el arquero sanpero, pero el rechace del mismo ya no sería desaprovechado por un atacante verdiblanco llegando desde segunda línea. Se complicaban las cosas.
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Más allá de un disparo en volea de Verbo, a centro desde la izquierda de Carlos Rodrigo, que se marchó ligeramente desviado, pocos disparos más se vieron sobre la portería visitante. A pesar de que las numerosas recuperaciones de balón en la medular, con Chuso Lucas y Ramón en el eje, al equipo le faltó velocidad y algún que otro automatismo para salir rápidamente a la contra e intentar sorprender al rival. Ese quiero-y-no-puedo se alargó demasiados minutos. Y, por si fuera poco, nada más comenzar el segundo tiempo, un penalti algo tonto en el área sanpera, acabaría aún más por hipotecar sus probabilidades de remontada.
Con el 0-2, que Pani estuvo a punto de parar con la cara, ya no hubo más opción para el Sanpa que correr riesgos. Trillo pasó a ser único cierre, con los apoyos de Chus, Ardiles o Sergio. La cuadrilla verdiamarilla se fue en búsqueda la portería contraria, pero se toparía con un oponente bien «blindado» atrás que apenas realizó concesiones defensivas. Los verdiamarillos adelantaron líneas, con Rodri, Ramón, Joan, Carlos y Ricard más avanzados, y presionaron arriba con Verbo, Lucas y Reverendo, pero siempre se chocaba una y otra vez ante la rocosa pared verdiblanca. Aún así, no cesarían hasta el pitido final en la persecución de ese gol que metiera al conjunto de Sant Joan Despí de nuevo en el partido. Mientras tanto, Pani se encargó de que la ventaja no se ampliara y las opciones no se desvanecieran. No así el paso del cronómetro, que pareció ir a un boltiano ritmo frenético.
El árbitro pidió el VAR porque tampoco se creía que el 11 hubiera marcado el gol.
Con todo, el Sanpa conseguiría finalmente el objetivo, pero ya sería demasiado tarde. En el descuento, en un libre indirecto ejecutado por Ramon dentro del área rival y todos los jugadores del Olesa bajo el arco de su portería, el esférico sería repelido en primera instancia por el pie de un defensor, cuyo rechace sería cazado más allá del borde del área pequeña por Reverendo, que soltaría un latigazo que acabaría con el balón en el fondo de la red (1-2). Primer tanto del atacante sanpero que, sin embargo, resultaría estéril porque no habría tiempo para más: imediatamente después de producirse el saque de centro, llegaría la señalización del final del partido. Así que, volaban así los tres puntos, si bien los verdiamarillos lo habían intentando hasta la última exhalación y se quedaron en la orilla. Una lástima, porque les faltó ese poquito de algo, en el arreón postero, para dar la brazada definitiva y alcanzar la pretensión de puntuar.
No obstante, la liga y la vida sigue, y la próxima semana tocará una nueva oportunidad de volver a sumar, con la visita a Eusebi Güell para verse la caras contra la AE Botigues de Sitges. Un interesante duelo, que podrá seguirse el sábado a partir de las 19 horas.
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