Gintonificados.
Tras el rapapolvo en Esparreguera, el partido contra el Santa Coloma de Cervelló se presentaba como una buena oportunidad para la UD San Pancracio de recuperar el buen camino iniciado ante el Deportivo Llobregat. No es que el rival fuera una “perita en dulce”, que no lo era a pesar de su engañosa clasificación fruto de su complicado calendario de inicio (4 partidos de los 7 disputados ante los 5 primeros clasificados), sino que ayudaba a alimentar la confianza que se ha ido cosechando en los partidos de casa tras el espantoso debut contra el Incresa Atlético, que al final resultarán claves para permanecer competitivos y dejar constancia de grandes momentos a lo largo de esta temporada.
Esa confianza vino reforzada con el tanto inicial de Barceló nada más iniciarse el partido. Apenas habían transcurrido 10 minutos cuando un balón bombeado fue peinado por Luís dentro del área y el bote sorprendió al defensor que estaba detrás, que falló en el despeje de cabeza. El regalo no lo desaprovechó nuestro bailongo sanpero, que encaró al portero y lo batió por bajo, ajustando el balón al poste derecho (1-0). Así que el partido adquiría una nueva ruta, con el viento favorable para el equipo local.
Tal vez el gol había llegado con algo de fortuna, pero igualmente el Sanpa se había mostrado, y se siguió mostrando, bastante dinámico. A Iván se le vio muy activo en los primeros minutos, intentando marcharse por velocidad y algún que otro regate, y George, muy motivado a lo largo del encuentro, estuvo omnipresente, tanto en defensa como en ataque. Una jugada iniciada por el primero, acabó con el segundo cruzando demasiado un esférico al borde del área, que se marchó fuera no muy lejos del poste (min.8). Y, más adelante, de la banda derecha se pasó a concentrar la actividad a la banda izquierda, donde Luís, que salió de inicio en punta, reclamó su presencia en el juego. Se hizo notar primero cuando filtró desde el lateral un pase hacia la arista del área a Barceló que, tirándose a ras de suelo, envió el balón a la cepa del poste largo para alivio del portero (y nuestro: imaginaos que hace un “doblete” en 15 minutos… cualquiera lo aguanta hasta Navidades). Después, a los 28 minutos, tras triangular con David y recibir una pared de Carri, su disparo casi desde la media luna del área, se marchó ligeramente a la izquierda del marco rival. Y para seguir con el atracón de protagonismo, tras una contra iniciada por Barceló y apertura a la izquierda de Juanito, intentó filtrar otro pase a la espalda de los centrales para Iván, al que le pilló a contrapié cuando se quedaba solo el portero (min.32).
Ambos equipos se marcharían al descanso después de un disparo de Juanito desde la frontal que el guardameta rival envió a córner (min.44). Si bien no podía decirse que el partido fuera un baño, lo cierto es que, dentro del relativo equilibrio, el Sanpa lo tuvo bastante controlado durante el primer tiempo. Rafi, presuntamente menguado físicamente, y Hensi no sufrieron especialmente atrás ante un equipo que perdió muchos balones. Toda la producción ofensiva del Santa Coloma se resumió a un disparo al borde del que se marchó demasiado cruzado al cuarto de hora de partido y las ocasiones a pelota parada. Las agonías para Muralla tendrían que esperar al segundo tiempo.
Como era de esperar con un resultado corto en un partido pendiente de resolución, el equipo cervellino apretó en el segundo tiempo e hizo sufrir al Sanpa. No es que se sufriera un asedio, pero se pasaron un momentos de serio apuro, como resultado de un choque algo más abierto. Con la entrada de “La Rata” Bernier en punta y Luís retomando sus funciones más habituales esta temporada en la media, el equipo estuvo alacecho del 2-0. La entrada del “junior” Elias y de Jona, que reaparecía tras su recaída en Sant Feliu, ayudó a reforzar esa idea, puesto que ambos estuvieron muy activos y generando sensación de peligro. Sin embargo, en la retaguardia verdiamarilla se pasaron algunos minutillos críticos.
Un balón muerto, paseándose a escasos metros de la línea de gol, conMuralla pidiendo falta tras no haber agarrado el balón y media defensa bajo el marco impidiendo el empujoncito definitivo, cerca estuvo de generar algún infarto. Para más INRI, las reclamaciones del meta sanpero siguieron una vez había atajado el balón y el árbitro le acabó señalando falta de saque por pérdida de tiempo. El libre indirecto dentro del área requirió una barrera multitudinaria, con Carlos incluido tapando el flanco, que acabó con pase atrás y… disparo por encima del larguero. Y por si algún corazón no hubiera sufrido suficiente, en la jugada posterior un centro desde la derecha se paseó por delante de la portería de Muralla, sin que ningún delantero visitante acertara a empujarlo, especialmente uno que entró al segundo palo. Se había visto la luz al final del pasillo.
Una vez superado el Defcon2, el Sanpa saldría del foso y volvería a tener sus opciones, gracias al trabajo de Barceló, Luís y Juanito recuperando multitud de balones, la incansable labor del cuarteto Rafi-Hensi- Menacho-George en defensa y la amenaza constante que resultaron Jona, Elías y Carlos. La sentencia definitiva llegaría a 7 minutos para el final como no podría ser de otra manera: Ratatatatatatataa “Marca de la Casa”!!!!. Un disparo desde fuera del área de Luís golpeó en “Ratilla” Bernier, que descolocó al portero y se quedó con el esférico amortiguado dentro del área. Más rápido que nadie, su primer disparo lo detuvo como pudo el guardameta, pero no tuvo piedad con el rechace, machacándolo a la red (2-0).
El gol de última hora del Santa Coloma de Cervelló, cuando un centro al área y el balón por los aires acabó picado con la cabeza a la base del palo derecho de Muralla (2-1), le dio una emoción final al marcador. Pese a la presión, no se temió mucho por el resultado, ya que el Sanpa supo sacar su oficio y mantuvo el peligro lejos de su portería, llevando sus posesiones las lejanas zonas de córner del rival, con Luís ejerciendo de “Carrasco” y Carri recordando al árbitro que “hacía frío”. De esta manera, llegó una nueva victoria, la quinta, de esta temporada, que mantiene la ilusión a la espera de los rivales de cabeza, que serán los que determinen por qué lugar de la tabla habrá que moverse en el futuro.
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