AVALANCHA.
Aunque parezca una lección de cómo mover las caderas, realmente son instrucciones.
Por fin se soltó la «bestia». Fantástico partido el disputado por las huestes sanperas, que arrollaron a un irreconocible Atlétic Vicentí en una auténtica y desatada «orgía» goleadora, para placer, entretenimiento y deleite de todos aquellos que decidieran acercarse al Casc Antic de Sant Joan Despí, para ver este partido de la 12a jornada del Grupo 8 de Cuarta Catalana. Lo abultado del resultado, hasta cierto punto sorprendente si se compara con las buenas actuaciones realizadas por el conjunto visitante en los últimos años en Sant Joan, supuso además toda una liberación goleadora para el Sanpa, algo sensible a las dudas después de varios reveses consecutivos en casa, la dolorosa goleada encajada en Can Clota (4-0) y la mala racha de 7 partidos sin conocer la victoria. Además permitió a los hombres de ataque, como Carlos y Toni, recuperar sensaciones y reconciliarse con el gol, para disfrutar de nuevo de ese elemento clave, tan necesario e indispensable, que alimenta la confianza de todo delantero.
La UD San Pancracio, dirigido por Gable para la ocasión, formó un equipo inicial repleto de prometedora juventud en torno a un sólido y veterano esqueleto forjado en el medio campo. Grego, en el eje de la defensa, Aitor Mateos y Barceló como «Land Rovers» en la medular y «Rata»de estilete formaron una experimentada columna vertebral reforzada por Guille y Marc Urbano por bandas, Álex de central, Romero de flanqueador y Óscar Yeste y Toni Mesa en ataque. Y el inicio no pudo ser más explosivo, porque no habían pasado ni 12 minutos de juego, cuando Carlos «Rata» Bernier firmaba su primer doblete de la temporada y colocaba un valioso 2-0 en el marcador.
Lord Descaro volvió a sentir su energia interior y abrió el marcador.
Aunque la actuación coral del equipo fue fundamental en el buen funcionamiento de la maquinaria ofensiva, el desenfado y la desenvoltura de Yeste aportarían un plus en estos inmejorables primeros minutos. Él mismo se crearía el espacio al borde del área para soltar el disparo cruzado que pudo despejar, pero no atajar, el portero rival, que apenas pudo reaccionar a la aparición del «cazador» Bernier al borde del área pequeña, que empujaría la red con el balón ajustadito al palo (1-0. Min.7). También filtraría al espacio un buen pase para Toni Mesa, que encararía al guardameta visitante, pero no lograría superarlo en el regate (min.11). Y la verticalidad sugerente que aportaría en la búsqueda de los demás referentes ofensivos, serviría de inspiración a otros compañeros de cara a buscar la espalda de la defensa visitante. Un magnífico balón de Romero, buscando a «Rata» en su incorporación desde la banda izquierda, encontraría a su receptor, que definiría a la perfección de cara a portería (2-0. Min.12).
Nuestros seguidos más acérrimos no quisieron perderse este gran partido.
Tras ese primer cuarto de hora de desenfreno sanpero, llegaría la reacción del equipo de Sant Vicenç dels Horts, que adelantaría líneas y , poco a poco, intentaría tomar la iniciativa. El Sanpa tuvo que aplicarse más en defensa, un trabajo que resultaría satisfactorio porque impediría que su contrincante llegara con excesiva claridad. Por si acaso, Óscar intervendría para reivindicarse en la portería, como la espectacular mano que sacó a un tiro parabólico desde la arista derecha del área, enviado a córner cuando amenazaba con colarse tocando la base del larguero (min.17). Mientras tanto, la escuadra verdiamarilla tampoco descuidaba la contra, que aparecía como un arma letal con la que ayudar a salir de la presión. De esta manera, una recuperación de Barceló, que provocó una rápida transición, permitiría a Yeste meter entre líneas un balón diagonal para Toni Mesa que, en esta ocasión, no perdonaría en el mano a mano ante el portero (3-0. Min.37). Cómoda ventaja antes del descanso, aún cuando el equipo visitante recortaría distancias muy poquito antes, tras una diagonal al área rematada de cabeza poco ortodoxo, cuyo bote sorprendió a Óscar (3-1. Min.44).
Tras su recital de asistencias, espera debut en la Filarmónica de Moscú o en la de Sant Martí de l’Erm
La media parte no le vino mal al Sanpa que, tras la reanudación, volvería a salir lanzado. En una especie de calco del primer tiempo, los primeros quince minutos del segundo fueron igual de mortíferos. En este caso, cabe destacar la irrupción de Albert Estradé en el campo, cuya entrada, repleta de ganas y «hambre» de fútbol se vio reflejado desde la primera de sus intervenciones, determinantes para dar otro golpe sobre la mesa y volver a estirar en el marcador. Primero, definiendo a la perfección ante el portero un pase en profundidad de Aitor, en una jugada de tiki-taka con varios pases al primer toque, hacia atrás y hacia delante (4-1. Min. 52). Después, «robándole la cartera» a un defensor, escaparse del mismo por velocidad y volver a batir al guardameta rival en su salida (5-1. Min.54). Dos «zarpazos» contundentes que dejaban el partido prácticamente listo para sentencia.
Por si fuera poco, antes de cumplirse el minuto 60, un magnífico pase raso en profundidad de Cañadas, recién ingresado en el campo junto Matteo, habilitaría un 2 contra 1 en el que Albert cedería a su izquierda, dentro del área, a Toni para que éste, a puerta vacía, ampliara la ventaja (6-1). Sin lugar a dudas, estaba siendo el mejor partido visto hasta ahora de Albert. Y, en esta línea, tal vez fueron, junto los del arreón contra al Abrera, los minutos más resolutivos, solventes e implacables del equipo en toda la temporada. Los chavales del Sanpa estaban enseñando los dientes.
La dupla Albert y Toni fue letal y sirvió de inspiración para un nuevo manga de Hitohiro Sanpero.
A pesar del duro resultado, el conjunto de Sant Vicenç dels Horts se esforzó por mantener el tipo e intentar maquillar el marcador. Fruto de ello llegaría su segundo gol, tras un saque de esquina, donde a ras de suelo uno de sus atacantes envió a la red otro remate de cabeza desde el vértice del área, pasado el segundo palo (6-2. Min.61). Y premio a su constancia, también llegaría un tercero, de penalti, tras un intento de penetración dentro del área con balón controlado que, ante la sopresa de todos, el árbitro señaló como pena máxima al ver algún contacto en la carrera (min.80). No obstante, poco más podría hacer, ya que nuevamente la dupla Toni-Albert volvería a hacer de las suyas: una extraordinaria diagonal de Barceló, de izquierda a derecha tras recoger un rechace, permitiera romper la línea defensiva para que Estradé, llegando de atrás, dejara de primeras un balón botando al punto de penalti, y desde allí Mesa, en vaselina, levantara sobre la salida del portero y estableciera el séptimo en el luminoso. Algo histórico, porque hacía mucho tiempo que la UD San Pancracio no alcanzaba un cifra semejante de goles a favor. Algo realmente memorable y digno de disfrutar por su excepcionalidad.
Los simpatizantes del Sanpa tampoco saben quién ese Abdou Boina ni porqué Islas Comores no dio ningún voto a ningun jugador del Sanpa en el Balón de Oro.
Sin embargo, más allá del 7-3 final, de los dobletes, tripletes, de los pases magistrales y las galopadas frenéticas , es necesario resaltar el formidable papel de todo el grupo. Desde los defensores, donde los Grego, Marc Urbano, Alex, Guille y, más adelante, Marc Reyes, que reapareció en los minutos finales tras salir de su lesión, desenpeñaron generosamente sus funciones; hasta los que generan y marcan los goles (Yeste, Romero, Toni, Rata, Albert). Pasando por la indispensable labor de aquellos que ayudan a que los unos y los otros cumplan con su cometido: los Barceló, Aitor, Matteo y Cañadas. Sin olvidar a Óscar en la portería. A pesar de las bajas importantes y de solo poder alinearse 15 efectivos, el equipo dio la cara, los más jóvenes avanzaron un paso adelante y se sacó una gran versión de si mismos ante un oponente que, si bien no llegaba en un gran momento (único equipo que no ha vencido aún como visitante), contaba con jugadores muy experimentados que han mantenido a su club dentro de la zona noble de la clasificación en las últimas temporada.
Esta semana, cuando queda menos de un mes para que acabe el año, llega el gran desafío de ser el primer equipo de hacer claudicar al imbatido líder de la competición: la PB Sant Vicenç dels Horts. Esta es una misión de enorme dificultad, pero tampoco resulta ajena y extraña, dado que el Sanpa ha demostrado, durante muchos años, ser capaz de sojuzgar rivales poco habituados a perder y con caminos demasiado llanos hacia el ascenso. Es por ello, que confiamos que, este próximo domingo, el equipo de Carri y Paco saque a relucir nuevamente una magnífica versión de si mismo, y demuestre que ningún aspirante que pretenda subir de categoría puede irse de del Casc Antic sin sufrir y sin dar lo máximo en su sentido más competitivo.
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