BUENOS BEMOLES SANPEROS.

Volvió la puntería de cara a portería

Resucitando. Tras varias semanas algo funestas a nivel de resultados, los muchachos del Sanpa se reinvindicaron ante el Sant Just y lograron un meritorio y valiosísimo empate que debe servir para volver a levantar el ánimo. El transcurso de esta ajetreada semana, posterior a la dura derrota en Abrera y con todo un ciclo de charlas y profundas reflexiones, ha servido para que el grupo verdiamarillo buscara una manera de reencontrarse consigo mismo, y volviera a mostrar nuevamente los signos distintivos positivos y potenciales de un equipo, que parecía estar completamente sumido en una auténtica crisis de identidad.

Poniendo lo que hay que poner, se obtienen mejores resultados

El duelo contra el Sant Just Desvern, tercer clasificado hasta la fecha, se presentaba como un durísimo compromiso. Primer verdugo de Sanpa en la primera vuelta, el conjunto de la campana de azur llegaba a Sant Joan Despí como uno de los visitantes más sólidos (solo ha perdido un partido a domicilio) del campeonato. Un expediente curricular que no tardó en certificar adecuadamente, puesto que a los pocos minutos ya se había puesto por delante en el marcador (0-1. Min.9). Sin embargo, el equipo de Carri y Paco no dejó amedrentar por tan desapacible circunstancia y reaccionó con casta y orgullo. Antes del ecuador del primer tiempo, el conjunto local ya le había dado la vuelta al resultado, con goles de Toni Mesa y Óscar Yeste (2-1. Min.24).

No se acabaría ahí un excitante primer tiempo repleto de alternativas, en el que los visitantes volverían a revertir la situación y a colocarse con ventaja en el marcador. En el último tramo antes del descanso, el Sant Just devolvería ese doble golpe goleador al Sanpa, algo retratado a la contra, dejando el resultado en la media parte con un ajustado y abierto 2-3 que reflejaba la ambición de dos equipos que estaban dispuestos a buscar la victoria.

A base de ganas e intensidad, el Sanpa lograría el empate con nuevo tanto de Toni (3-3. Min.60), y abriría completamente el escenario a una contienda que pudo haber caido para cualquiera de los dos bandos. Al final, justo reparto de puntos y clara demostración sanpera que, a base de trabajo y convicción, se puede superar cualquier obstáculo. Y que un grupo unido, con voluntad, puede salir de cualquier pozo y presentar la batalla que sea necesaria.

Confiemos que la mejora se prolongue la próxima semana en Santa Coloma de Cervelló, ante el AE Sant Lluís.