COMPITIENDO.
Meritorio empate del Sanpa que, por segunda vez tras el inicio de temporada, ha conseguido encadenar dos partidos sin perder, dentro de la línea de mejoría que ido experimentando tras su importantísima victoria del pasado 14 de Enero ante el entonces líder del grupo 11, el pujante Marina Atlético. Tal vez el resultado se quedara corto, ya que se mereció ganar a un Vista Alegre que hizo más bien poco para puntuar en Sant Joan Despí y que apenas hizo honor a su puesto en la clasificación. Lo más negativo del partido, sin embargo, no fue lo injusto del marcador, si no las lesiones que se produjeron a lo largo del mismo. Elías, que perdió un diente en un brutal choque fortuito con una adversario que acabó con una brecha en la cabeza, y Pedro, con un contundente golpe en las costillas de otro rival que se iba cayendo en otra acción accidental propia del juego, salieron con parte médico dirección a la Mutua de Futbolistas, incrementando así el trágico y desastroso balance de lesiones que están azotando al equipo A de la UD San Pancracio, que cada vez se encuentra con mayores dificultades para completar las convocatorias.
Consecuencia de ello, nuevamente se tuvo que contar con jugadores del Sanpa B para poder afrontar con garantías un partido que se antojaba de antemano ciertamente difícil. Fiel a su espíritu competitivo, el equipo verdiamarillo no desentonó y mantuvo a su rival a raya, dejando prácticamente que Juanito «Coria» se conviertiera en espectador de lujo en la portería durante casi toda la primera parte: solo tuvo que intervenir en una ocasión, antes de dejar paso a Aleix tras el descanso. «Chapeau» a la enorme entrega de los Paco, Hensi, Sergi y Pedro para neutralizar toda amenaza adversaria. Cierto es que tampoco puede decirse que el Sanpa fuera un reiterado ataque en tromba, pero sí que se le vio más favorecido y cómodo con un contrincante que simplemente estuvo para verlas venir, por el tipo de juego que se practicó durante los primeros 45 minutos, con muchos desplazamientos en largo en los que destacó sobremanera el inmenso trabajo de Alan y la constante labor de Carlos Bernier. De esta manera, Sergi sería el primero en contar con una grandísima oportunidad de abrir el marcador al rematar de cabeza un saque de córner, pero encontró una no menos grandiosa intervención del portero para enviar de nuevo a saque de esquina.
La fortuna y el cancerbero visitantes fueron determinantes para que el marcador no se moviera antes del descanso, tras unos minutos finales de auténtica locura. En el minuto 40, un saque de falta botado por Joan desde casi medio campo fue cabeceado hacia propia portería por un defensor hacia atrás, obligando a una acrobática e impresionante mano del guardameta rival, que la sacó in extremis y sobre la línea de gol cuando se colaba por la escuadra. Tras la ejecución de ese saque de esquina, solo la presencia corporal accidental de la «Rata» impediría el que hubiera sido el primero gol del partido, al encontrarse en medio de la trayectoria del balón que surgió de una nube de piernas, que se dirigía inexorablemente hacia el fondo de la portería (min.43).
No menos claras fueron las que tuvo como protagonista a Elías que, lejos de venirse abajo por el bestial encontronazo recibido, reaccionó hipermotivado y dispuesto a comerse el mundo (aunque fuera con una pieza dental menos). Primero, una gran jugada suya por la izquierda acabó en centro a Carlos, cuya disparo forzado sobre el portero (que lo arrolló por completo) se marchó ligeramente por encima del travesaño (min.45). Y en el tiempo de prolongación, «Tiger» El Aissiti aún hallaría el pasillo entre tres defensores para colarse entre ellos a base de regates y disparar a puerta, pero su chut impactaría en el exterior de la red. Solo la campana salvó al conjunto de Castelldefels.
Tras la reanuación, la conexión Rafa-Carri, que tan bien estaba funcionando en el medio del campo, resultaría clave para abrir el marcador. El «Meyi de Arda» se plantaría en la linea de fondo y su pase hacia atrás no llegaría a «La Rata» Bernier, pero el despeje sí lo que aprovecharía el “Mariscal de Campo” del Sanpa para soltar un «carrillazo» imparable al fondo de la portería (1-0. Min.67). Un gol que premiaba a quién más lo buscó, pero que, por desgracia, suscitaría una alegría que apenas duraría tres minutos.
Circunstancias de la vida, cuando peor estaba el equipo visitante, llegaría el empate. La entrada de Grego y Guru en la defensa sanpera tras el descanso supusieron un significativo refuerzo en la retaguardia, que formaron un veterano candado defensivo cada vez más difícil de quebrar. En pleno atasco, el Vista Alegre, tan necesitado del triunfo como incapaz de llegar al área de Aleix mediante jugadas o cualquier elaboración de juego, hubo de tirar de recursos. Esto se manifestó en la constante búsqueda de faltas cercanas del área o de saques que les permitiera desarrollar jugadas de estrategia. El penoso recital de piscinazos y berridos, movido por la desesperación, daría su resultado, ya queuna falta más que dudosa cuando el atacante había perdido el balón (buscando el choque con el defensa cuando la pelota seguía otra trayectoria), le permitió disponer de un libre directo en inmejorable posición al borde del área. La ejecución, eso sí, fue incontestable: el esférico acabó en el fondo de las mallas entrando por toda la escuadra izquierda del arquero sanpero. Un golazo de bellísima factura (1-1. Min.70).
El “shock” por el gol fue notable, más aún cuando Joan había tenido también de falta la posibilidad de haber establecido el 2-0 solo un minuto antes. En cinco minutos de desconcierto, el Sanpa estuvo a punto de tirar todo el inmenso trabajo realizado por la borda. El Vista Alegre, ofensivamente estéril casi todo el partido, tuvo su ocasión de adelantarse en el marcador en dos ocasiones, una tras una clarísima falta de un delantero que dejó a todos parados (y acabó fuera a portería vacía porque ni siquiera el atacante se creyó que estaba habilitado) y otra tras un error de entrega de Aleix, que lo corrigió con una acrobática palomita en rectificado ante el posterior disparo. Para acabar de certificar el despropósito llegaría el surrealista penalti que pondría por delante al equipo visitante, tan inusual que el mismo árbitro reconocería una vez acabado el partido que se había equivocado porque no había visto el contacto y se había dejado llevar por la sobreactuada caída (y las furibundas y encarecidas protestas visitantes). Ajena a la deportividad, la pena máxima se lanzó y acabó en gol (1-2. Min.76).
Por suerte, la justicia natural hizo aparición y Sergi puso las cosas en su lugar. Un saque de esquina botado por Joan desde la derecha, lo cabecearía “Hendrick’s” Trillas al segundo palo, adelantándose a su marcador (2-2. Min.80). Una igualdad algo más acorde a lo visto durante en el encuentro y que pudo romper Alan en la recta final. Su primer disparo, al minuto siguiente, consiguió detenerlo el guardameta rival, sin duda el mejor de su equipo en el Casc Antic. 
El jugadón que quedaría, sin embargo, sin premio llegaría a falta de 3 minutos para el final, cuando Carlos metió un balón al centro para Elías, éste dejó pasar y Deivid Moyano, que acababa de entrar en el campo, filtró el esférico hacia su izquierda para la llegada al área del “Almirante” Bracke. En dos ocasiones, el arquero logró impedir lo que hubiera sido el merecido gol de la victoria y, de esta manera, el encuentro concluiría en tablas.
Por lo tanto, buen partido de un Sanpa globalmente mejor que, más allá de haberse ganado llevarse la victoria, demostró que puede competir contra cualquier rival, independientemente de su puesto en la clasificación.
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