TAN CERCA, TAN LEJOS
Hay que mejorar el putt
Empate del Sanpa en el último partido en casa de este año 2019. A pesar de las buenas sensaciones, la actitud adecuada y el extraordinario trabajo colectivo, que hace creer que este duelo (como algún otro anterior) podía haberse ganado, el equipo verdiamarillo volvió a caer en ciertos momentos de «pájara», ante un rival muy directo, que supo aprovecharse de esas vulnerabilidades y colocarse, hasta en dos o casiones, por delante en el marcador.
El conjunto de Carri y Paco es competitivo pero le sigue faltando ese plus de confianza y de temple que le permita mantener la concentración y la calma en determinados momentos del partido. La Montserratina se adelantó en un despiste defensivo, a balón parado, con un remate sin demasiada oposición en el segundo palo (0-1. Min.26). Esto empujó a una necesaria reacción local que, a base de orgullo y pundonor, supo reponerse y darle la vuelta al marcador antes del descanso gracias dos tantos de Alfonso (min.28 y min.32). Dos acciones de mucho mérito, que sirvieron para aportar una mayor tranquilidad y afrontar en buenas condiciones la segunda parte (2-1).
Hay momentos que se nos hace de noche…
Sin embargo, a pesar de estar bajo aviso, el Sanpa salió algo tibio tras el descanso y el conjunto de Viladecans supo sacar tajada de ciertos errores. En seis minutos, todo el esfuerzo realizado tras el gol inicial quedaría revertido con dos tantos visitantes (min. 48 y min.51. 2-3), que volverían a reclamar una mejor y más atenta versión sanpera si, como prometía en el primer tiempo, el objetivo era que los puntos se quedaran en casa.
Porque el Sanpa puede dar esa versión, algo que se pudo comprobar en los minutos siguiente. Con muchísimo criterio con el balón en los pies, combinando y moviendo al contrario de un lado a otro y entrando desde segunda linea con combinaciones y paredes, los verdiamarillos gustaron y se hicieron merecedores, al menos, del empate. Éste llegaría a pies de Romero que, desde fuera del área, aprovecharía un rechace de cabeza a un saque de esquina para ajustar al palo y establecería el 3-3 (min.64). Aún había partido.
En los minutos restantes, cualquiera de los dos equipos pudo llevarse la victoria. El Sanpa tuvo sus opciones, manteniendo el estilo combinativo y bien estructurado que suele practicar en los entrenamientos. Dispuso de varias ocasiones y reclamó un penalti a Luis, aparentemente muy claro, que podría haber roto la baraja a favor del bando local. Por el contrario, aparte de las luces, también hubo sombras. Sufrió bastante con el fútbol directo y de desplazamientos en largo buscando la espalda de la defensa de los visitantes. Una contra de la Montserratina cerca del final, salvada milagrosamente, bien pudo haber causado un nuevo disgusto en la parroquia sanpera.
Conclusión: pitido final y reparto de puntos entre dos conjuntos muy vivos y que, a su manera, buscaron llevarse el triunfo. Y el Sanpa que acabará este año 2019 en el campo del Almeda, con la vista puesta en la primera victoria de esta temporada.
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